El productor de leche de La Laguna (LALA) anunció un nuevo producto lácteo sin lactosa, proceso que logró en base a diferentes filtros de membranas con poros nanoscópicos, lo que permite separar los diferentes componentes.
La presencia de glucosa libre ocasiona que las leches deslactosadas presenten un
dulzor característico, que en ocasiones no es grato al paladar de todas las personas.
La nueva línea de leches LALA 100 Sin Lactosa, en cambio, es producida a través de un proceso de ultrafiltración (UF), lo que le ayuda a conservar el sabor natural de la leche.
Además del proceso de separación, la proteína y calcio se concentran en las versiones altas en proteína, resultando en 70% más proteína y 30% más calcio que la leche regular.
La lactosa no se elimina toda porque se eliminaría el sabor a “leche”. Se deja 30% menos lactosa que en la leche regular. El remanente de lactosa se deslactosa de manera tradicional.
Durante el proceso de elaboración, la leche deslactosada o sin lactosa, no pierde
sus componentes nutrimentales, los conserva con la ventaja que será mejor
tolerada y digerida.
De esta forma, la leche deslactosada y la leche sin lactosa, son una buena fuente natural de calcio, proteína de alta calidad y otros nutrimentos, y una excelente opción para los individuos con intolerancia a la lactosa.
Intolerancia a la lactosa
Es una condición que afecta a algunos individuos que tienen deficiencia de la enzima lactasa, resultando en la inhabilidad de digerir la lactosa de manera apropiada.
Cuando la lactosa no es digerida, llega al colon, en donde las bacterias la utilizan para su metabolismo anaeróbico, que tiene como productos finales el ácido láctico y CO2. Estos pueden ocasionar diarrea, meteorismo y dolor abdominal, explicando la sintomatología de la intolerancia o mala digestión de lactosa. Los síntomas suelen ser pasajeros y se relacionan directamente con la cantidad de lactosa ingerida.
Alto contenido de proteína
Gracias al proceso de ultrafiltración mencionado anteriormente, la línea de leches
LALA 100 Proteína tiene 70% más proteína y 30% más calcio que las leches comunes.
El valor nutrimental de una proteína está relacionado con el aporte de aminoácidos indispensables al organismo y con su digestibilidad.
Las proteínas de la leche son consideradas de alta calidad nutrimental, debido a su alta biodisponibilidad y aporte de todos los aminoácidos indispensables, además contienen una gran proporción (21%-26%) de los aminoácidos leucina, isoleucina y valina. Estos tienen un rol único en promover la síntesis de proteína muscular.
La sarcopenia está asociada con el proceso de envejecimiento. Se caracteriza por la pérdida de masa y fuerza muscular que afecta el balance, control y habilidad general para realizar las tareas de la vida diaria.
Por mucho tiempo se creyó que la pérdida muscular y otros signos asociados con el envejecimiento eran parte de un proceso inevitable. Sin embargo, la investigación reciente está identificando formas por las cuales se desacelera el proceso de envejecimiento, específicamente en relación a la pérdida de masa y fuerza muscular.
También se ha identificado que ésta pérdida es un proceso complejo y multifacético.
La sarcopenia no sólo afecta a personas sedentarias, también a quienes se mantienen activos a lo largo de sus vidas. Lo cual indica que el sedentarismo no es el único factor.
La sarcopenia conlleva una pérdida de calidad de vida, menos quema calórica al tener menos masa metabólica activa y mayor propensión al sobrepeso, fatiga, fragilidad y menos aptitudes físicas.
Varios nutrimentos, incluyendo la creatinina, vitamina D y la proteína del suero de la leche, han mostrado potencial para reducir el ritmo de pérdida de masa muscular en la sarcopenia.
Existen varios estudios, como el de Dangin M y colaboradores, en el cual se demostró que la proteína del suero de la leche es especialmente efectiva en preservar la masa muscular en adultos mayores.