El porcentaje de casos de cáncer de riñón en la última década en el país han aumentado, alertan los especialistas. Actualmente al año se detectan 4 mil nuevos casos, de los cuales un 50 por ciento son detectados en etapas avanzadas provocando con ello una alta incidencia de muerte, lo que lo convierte en la 12ª causa de mortalidad con un índice de fatalidad de 0.52, es decir, el 50% de los pacientes muere a causa de este padecimiento en el mismo periodo de tiempo.
El cáncer de riñón o carcinoma de células renales se encuentra entre los diez cánceres más comunes, siendo más frecuente entre hombres que en mujeres, y afecta en un 90 por ciento de los casos a adultos mayores de 50 años, advierte el Dr. Bernardo Gabilondo Pliego, Jefe de la Unidad de Urología del Hospital Médica Sur.
Es probable que no presente ningún tipo de síntoma en sus etapas iniciales, lo que dificulta el tratamiento oportuno reduciendo las posibilidades de vida del paciente. De acuerdo con cifras del Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga” hasta el 30 por ciento de los pacientes reciben diagnóstico con enfermedad metastásica.
Por lo anterior, los expertos llaman a poner atención a síntomas como: sangre en la orina, presencia de masas o bulto en uno de los costados, presión o dolor en la zona lumbar constante y no desaparece, pérdida de apetito, de peso sin razón conocida, anemia, entre otros, a fin de recibir un diagnóstico y el tratamiento más adecuado.
Aunque se desconoce la causa directa de este tipo de cáncer, la Sociedad Americana de Cáncer señala como factores de riesgo asociados: la edad avanzada, el tabaquismo, la obesidad, la hipertensión arterial, la enfermedad renal avanzada, el mal uso de cierto tipo de medicamentos, el Síndrome Von Hippel-Lindau (enfermedad causada por la mutación de un gen) así como antecedentes familiares con este padecimiento.
Como en otros tipos de cáncer, un diagnóstico oportuno puede marcar la diferencia en la calidad de vida del paciente. Respecto a el tratamiento, este difiere dependiendo de factores específicos como la edad, las condiciones de salud, así como la etapa del cáncer en la que se encuentre el paciente. “Actualmente existen tratamientos que garantizan un mejor abordaje aún en sus etapas más avanzadas, pero en nuestro país estos son de alto costo lo cual hace difícil su acceso, lo que puede representar una barrera y un golpe al gasto de bolsillo que realizan los pacientes para atender este padecimiento”, señaló el Lic. Carlos Castro Sánchez, Presidente Ejecutivo de Asociación ALE, I.A.P.
Por su parte, Deborah Maskens, sobreviviente de cáncer renal y Vicepresidenta de la International Kidney Cancer Coalition (IKCC) señala que “es importante que las autoridades sanitarias desarrollen y pongan en práctica políticas públicas que garanticen el acceso a tratamientos integrales a los pacientes sin importar su condición socio-económica, ya que una intervención oportuna puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte”.